Buenas a todos,
Mi nombre es Fernando y hasta hace unos días estaba en proceso de compra de mi primera vivienda con mi pareja en el area de Barcelona, concretamente en Castelledefels.
Nos sentimos estafados por la inmobiliaria llamada Happy House Servicios Inmobiliarios y su dueña Esther Arnal Gallart.
Os cuento lo sucedido:
A primeros de Junio 2022, nos encontrábamos buscando vivienda para comprar en la zona de Castelldefels (Barcelona). Sería nuestra primera vivienda.
El 15 de Junio encontramos un anuncio en el portal inmobiliario de Habitaclia, gestionado por Happy House Servicios Inmobiliarios, una agencia inmobiliaria con sede en Castelldefels, cuya propietaria es Esther Arnal Gallart.
Nos ponemos en contacto con ellos y formalizamos una primera visita para el 20/06/2022 a la que acudiría yo solo.
El 22/06722 se realizó una segunda visita con mi pareja y se realizaría una última visita el 25/07/2022 (con los padres de mi pareja). Todas las visitas fueron realizadas con Alicia, una trabajadora de Happy House.
El piso se encontraba a la venta por 3xx.xxx€, Alicia me comenta que habían hecho una oferta por 40.000€ menos que los dueños rechazaron.
Preguntamos a Alicia por la distribución original del inmueble ya que habían hecho reformas. Nos dice que ella no está segura, que la que más sabe sobre el inmueble es Esther Arnal propietaria de la inmobiliria y muy amiga de la vendedora Margarita.
Yo le había comentado a Alicia que nosotros teníamos una hipoteca pre-aprobada de 3xx.xxx€. (10.000€ más que la oferta anterior) y cree que podrían aceptar.
Después de expresar nuestro interés, Esther Arnal se puso en contacto conmigo por teléfono. Esther me comenta que hay una oferta en firme por 3xx.xxx€ (la misma cantidad que nostros) y que los dueños se lo estaban pensando, que creía que subiéndola muy poco los dueños aceptarían la nuestra.
Yo le explico que nuestra hipoteca ya está aprobada y que no queríamos replantearla, así que ofreceríamos 3xx…xxx€ (lo que teníamos aprobado). Me dice que va a ver que puede hacer, que lo hablaría con la dueña y que me devolvería la llamada.
Me llama y me dice que aceptan la oferta de 3xx.xxx€, que prefieren a alguien que ya tenga la hipoteca aprobada, que le caímos bien a la propietaria y prefiere vendérnoslo a nosotros.
Nosotros nos ponemos en contacto con el Banco Santander para darle vía libre a la operación y seguir con los trámites de la hipoteca. Esther nos comenta una fecha para formalizar la reserva mediante un contrato y realizando un pago de 3000€ en la inmobiliria.
El día siguiente me llama y me dice que no habrá reserva, que la dueña tiene que dejar hechas unas gestiones personales antes de realizar la venta, que ya ve que somos personas serias y de palabra y que el pago de la reserva ya se incluiría en las arras.
IMPORTANTE:
Nos envían desde la inmobiliaria la nota simple el día 12-07-2022. Esta nota simple fue solicitada por Esther Arnal en fecha 25-04-2022. “Tres meses” habían pasado para darte cuenta de que existen “cargas importantes” que habría que explicar a cualquier comprador y aún más siendo tu amiga la propietaria de inmueble. Esto demuestra lo “conscientes y deliberados que eran sus pasos a seguir”.
Desde este punto Esther ya empieza a omitirnos información sobre estas cargas, nunca mencionó nada si había algo importante en la nota simple ni que las supuestas gestiones de la propietaria tenían relación directa con el inmueble.
Aún así, consultamos con una inmobiliria externa esta nota simple, los cuales nos comentan que existía un proceso judicial abierto en el juzgado de Gavá. Que nos informaran bien de que se trataba antes de continuar. Ya que podía tratarse de una deuda, embargo, subasta o cualquier otra cosa a tener en cuenta.
Esther sigue muda respecto a esto, en ningun momento menciona ninguna carga. Mi pareja tuvo que enviarle un email preguntando sobre estas cargas a lo que Esther contesta:
No hay cargas de procedencia pero sí propias. En el momento de la firma de compraventa de la escritura pública en notaría, estas cargas serán liquidadas. Ya te explicaré el procedimiento.
Aquí aún confiabamos en su experiencia y aceptamos la explicación. Enviamos toda la documentación que nos faltaba sobre el inmueble al banco para continuar con el papeleo.
Los propietarios vivían todavía en el inmueble. Esther nos comenta que necesitarían 2 meses como mínimo de alquiler postventa para buscar un piso a donde mudarse. Que en plena temporada de verano sería muy difícil que encontraran algo para mudarse rápido, que acordaríamos un precio mensual de alquiler y que abandonarían el piso a finales de Septiembre 2022. (ojo a este dato proque más tarde nos pondría en una buena tesitura)
El banco nos solicita la tasación del inmueble. Preguntamos a Esther por si tenía algún tasador de mano conocido. Nos recomienda un amigo, que trabaja con ellos y nos haría precio especial. La tarifa aún con el descuento, acaba siendo la más alta de todas las consultadas (515 Eur) aún así aceptamos y la realizamos con él.
Seguidamente Esther redacta un contrato de arras. Transcribe literalmente la “nota simple” en el contrato “con este proceso judicial en curso” incluído además de las condiciones del alquiler postventa. Llega el día de firmar arras Viernes 10 de Junio, teníamos la cita a las 19:30h de la tarde en la inmobiliaria con la propietaria y Esther.
Llegados a este punto, sigue sin comentarnos nada de estas cargas reflejadas en la nota simple, simplemente que hay cargas, sin darle importancia alguna y sin interés alguno por averiguar cuales eran estas cargas a pesar de que la propietaria era su amiga. Nosotros no dabamos crédito a esto. Y eran solo ellos los que podían informarnos puesto que al ser un proceso judicial, solo los propietarios y el abogado disponen de información.
A las 11h de la mañana del día para firmar arras, me llama nuestro gestor del Santander, y me dice que tengamos cuidado con lo que firmamos ya que hay una deuda con el Bankinter por la hipoteca de la casa y que Esther quiere seguir adelante igualmente, que no pasa nada por eso. El le dice que las cosas no son así, y nos recomienda que no firmemos hasta que no se aclare de que se trata este proceso, cuanto se debe y como lo van a liquidar.
Posteriormente a firmar las arras teníamos que firmar la FEIN a la que el banco se negaría con estas cargas todavía pendientes sin negociar.
Esther nos comenta que los vendedores le han dicho que deben 2-3 meses de hipoteca y de ahí estas cargas.
Nos ponemos en contacto con un abogado para consultar esto y nos dice que si es posible nos envíen alguna documentación para ver en situación está este proceso judicial y que nos aclararen cosas como:
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Decreto de admisión
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Decreto de ejecución y proceso en el que se encuentra
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Las cargas, que es lo que se debe, que se reclama y como se va a liquidar con el banco
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Que demanda hay puesta
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Si esto se hace extensible a algo más de la finca
El abogado también nos comenta que estos procesos solo se ejecutan cuando hay un impago de más de 15 meses, no por dos o tres como nos comentó Esther, que en todo momento se hace la sorprendida.
El abogado tampoco entiende como todavía Esther no está puesta al día de esta deuda pendiente de los propietarios que nos afecta directamente a la compra y aparte de todo si esta propietaria es amiga suya. Me pregunto que clase de amigo es uno que te omite cosas relevantes cuando te encargas de vender su casa.
El gestor del Santander, investiga un poco más por su cuenta y descubre que hay una deuda pendiente 1xx.xxx€ con el Bankinter, razón por la que se ha abierto este proceso judicial.
Nos comenta que para solucionar esto, el Santander necesitaría el contacto del abogado y/o procurador del bankinter para poder solicitarle los mandamientos para levantar la certificación.
Para poder aprobar y seguir adelante con la compra, se necesitaría una confirmación de que van a desistir de procedimiento y va a enviar en el momento de la firma el desistimiento por una aplicación llamada LEXNET para así poder adjuntar el documento a la escritura de CV. (se que este proceso es instantáneo)
A partir de este punto, el interés por parte de Esther y los propietarios decae . Nos comenta que está hablando con los propietarios, pidiéndoles esta documentacíobn y que aún se le ponen de malas ya que son temas privados suyos y quieren solucionarlos por su cuenta. Que están negociando con el Bankinter peto que tienen que esperar.
Por otra parte, el anuncio de habitaclia seguía activo ya que nunca se dió de baja. Sospechábamos que había poco interés y que podían estar buscando otros posibles compradores a la vez. Así que llamamos al anuncio haciendonos pasar por un interesado para para preguntar si se podía visitar y así fue, el piso seguía disponible.
Nosotros teníamos un plazo con el banco que nos iban extendiendo dado el poco avance de los trámites entre propietario y el Bankinter. Los tipos de interés estaban subiendo y el banco nos estaba guardando las condiciones ya que unas nuevas condiciones eran muy diferentes en ese momento.
Tanto los propietarios como Esther, seguían sin mover ficha dejando pasar los días para que nosotros desistieramos o nuestras condiciones con el banco caducaran. Teníamos que preguntar nosotros y Esther no nos daba ninguna información nueva.
Un día me llama Esther y me dice sin más que cree que sería mejor cancelar la compra porque la cosa se estaba torciendo. Que cuando las cosas no salen es mejor no forzarlas.
A mí me deja atónito la pasividad con la que me lo dice, queriendo echar por tierra todo el trabajo hecho hasta el momento y dejar la venta a un lado como si fuera literalmente una compra de Amazon.
Nuestro gestor nos pregunta si podría el contactar directamente con Margarita para agilizar todo y que ella le facilite información sobre el proceso judicial con el Bankinter. A lo que Esther no accede porque dice que la cliente se podría enfadar, cuando ella misma era incapaz obtener información de su amiga.
Estaba claro que no quería que nosotros avanzaramos ya que imagino que habían encontrado a otro intersado.
Ahí seguimos sospechando que el interés cada vez iba a menos o ya era nulo. Esther continua diciendo que los propietarios siguen negociando y que el Bankinter si aceptaría liquidar la deuda con la venta de la finca pero que no saben plazos. Que los propietarios llamarían a nuestro gestor.
El Lunes unos días después, le pregunto como va todo y me dice que no tiene noticias. Que mañana Martes día 26/07/2022 llamará a los dueños para informarse.
Hoy Martes me llama y me dice que tiene malas noticias. Sin más, me dice que se cancela la venta, porque la vendedora ha encontrado un amigo que le ha hecho una oferta mejor y pagará al contado así que se lo venderá a él. Y esta mujer con más cara que espalda, se queda tan ancha, con la misma pasividad con la que me dijo anteriormente que era mejor cancelar la compra.
Y esto lo dice como si ella no tuviera nada que ver en el asunto. Como si no lleváramos un montón de gestiones detrás, al banco esperando, al notario, muchas preocupaciones, mucho tiempo invertido, tasaciones, movimientos de dinero, molestias a familiares, contactos con nuestro actual casero, etc…